De manera gratuita, si las circunstancias lo permiten, se realizara una primera inspección visual mediante una cámara especial, para determinar el grado de obstrucción de la tubería.

Comprobaremos además la existencia de algún tipo de fuga, sometiendo a la tubería a una prueba de presión.

Bien mediante el uso de presión de agua con toberas de alta presión o mediante la propulsión de corindón, eliminaremos toda la suciedad del interior de las tuberías, que las obstruyen. Dejándolas en perfecto estado para la posterior aplicación de la resina.

Una vez eliminado todo el fluido del interior de la tubería, procedemos al secado de la misma mediante cañones de calor para la total eliminación de la humedad y así poder aplicar la resina Epoxi con total garantía.

Una vez que la tubería está totalmente limpia, se procede a la inyección de nuestra resina Epoxi patentada S28, recubriendo de esta forma el 100% de la tubería.

Con la ayuda de un robot patentado que es capaz de acceder por tuberías desde 90 mm de diámetro, aplicaremos la resina en el interior de la tubería utilizando esta como molde.

Una vez que el proceso está totalmente terminado se procederá a una nueva inspección de cámara para comprobar que el recubrimiento de la tubería es el correcto.

En caso de ser posible la realización de este video, le será entregado a la propiedad en prueba del trabajo realizado. Este trabajo siempre es dependiente del diametro de la tubería.

Cuatro horas despues del secado, la tubería puede utilizarse en condiciones óptimas. El resultado es ESPECTACULAR. La tubería queda nueva y su durabilidad está garantizada para más de 40 años.